Interesadx en el trabajo por la Salud Mental a partir de las experiencias propias de lxs individuos, grupos y comunidades. Interesadx y dispuestx con la construcción de espacios seguros que permitan la convivencia de la diversidad para poder explorar las alternativas que resisten a los ejercicios estructurales de injusticia y violencia. 

Ana vive en el norte de Argentina, en una ciudad llamada Tucumán. Estudió medicina con la esperanza y el compromiso de colaborar con las personas para que puedan llevar una vida mejor, pero al transitar la carrera y al encontrarse con las prácticas clínicas comenzó a sentir que las personas no eran escuchadas, que lo único que importaba en medicina era la organicidad. Escuchar ese malestar hizo que ella eligiera Psiquiatría, con el deseo que en esa especialidad hubiese espacio para escuchar las historias de las personas y para poder salir de la dicotomía mente-cuerpo. Transitó la psiquiatría creyendo que ahí iba a encontrar respuestas, pero se encontró de nuevo con el diagnóstico, la patologización y la medicalización de las personas.

Estudié etnología en la Escuela Nacional de Antropología e Historia y danza contemporánea en la Facultad de Artes-ASAB (Bogotá, Colombia) y en la Escuela Ollin Yoliztli (CDMX). Fui curadora de la exposición Intersección: un diálogo entre antropología y arte contemporáneo en 2018 y Miradas negras en 2019. Fui representante de Afroféminas en México (2019-2021) y columnista de la revista feminista Malvestida (2019-2022).

Establecí la Delegación de la Secretaría de Programación y Pesupuesto (SPP) delegación Yucatán (SPP) a partir de la experiencia institucional de la Secretaría de la Presidencia que conformó los Comités de Planeación del Estado (COPLADE). Principal logro: Subordinar los programas de inversión para el desarrollo rural (PIDER) a los tiempos de la milpa y no a los del gasto público. A partir de un acuerdo con las comunidades en asamblea hablada en lengua Maya con traducción al español y en presencia del Gobernador del Estado todas las dependencias del gobierno Federal y Estatal harían obras en los territorios de las comunidades, una vez que estas hubieran terminado los trabajos requeridos por la milpa, asegurando las cosechas y la aportación a la obra pública de mano de obra y materiales de la región, como lo pedían las reglas de operación de los programas públicos.

Kimberly Chiswell Barron se identifica como una migrante, no invitada, a Australia. Tiene ascendencia anglo-mexicana con privilegio de género blanco y cisgénero.  Completó su licenciatura en Trabajo Social en la Universidad de Sydney en el año 2000 y tiene más de 20 años de experiencia como terapeuta, supervisora y gerente de servicios sociales. Kimberly completó su Diplomado de Terapia Narrativa en 2004 y su certificado en Práctica Basada en la Respuesta en 2021.

Carmen Marina Campos Barraza originaria de Mexicali Baja California, es psicóloga egresada de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) y concluyó su Posgrado en Prácticas Narrativas en el Trabajo Comunitario y la Educación (Centro de Estudios para el Desarrollo Rural CESDER y la Universidad Campesina En Red UCIRED). Cuenta con entrenamiento en Terapia Familiar e Intervención Sistémica, terapia breve y terapia cognitivo conductual, prevención, detección y tratamiento de comportamientos adictivos por el Centro Interdisciplinario de Atención Educativa a la Comunidad (CIAEC).

Formada en Prácticas Narrativas y Feminismos por el Colectivo de Prácticas Narrativas, donde actualmente colabora coordinando el área práctica del Diplomado Internacional en línea en Prácticas Narrativas, así como en la Maestría internacional de prácticas narrativas en la Universidad del Medio Ambiente (UMA).

Psicólogo egresado de la Facultad de Ciencias Humanas de la UABC, Maestro en Ciencias de la Educación con énfasis en Educación Especial por parte de Cetys Universidad Campus Mexicali, así como, Maestro en Prácticas Narrativas por parte de UCIRED/CESDER y egresado del Posgrado en Prácticas Narrativas en lo Educativo y lo Comunitario. Formado en Terapias Postmodernas y Narrativas, así como Diplomado Teórico-Clínico de parejas, por el Instituto Latinoamericano de Estudios para la Familia A.C.

Mi interés por las personas me llevó a estudiar psicología en los años 90 en Valparaíso, Chile, país en donde vivo. Desde ese entonces he ido combinando dos grandes pasiones, el aprender y el viajar y no he dejado de buscar formas de hacer psicoterapia que miren al ser humando más allá del diagnóstico y la patología, además he tenido un especial interés en mirar lo que nos pasa en la vida a las mujeres. Fue así que, en el año 2002 en España, mientras cursaba un Master en Psicoterapia en la Universidad de Salamanca, leí por primera vez y conocí la Terapia Narrativa. Desde ese entonces no paré de buscar donde aprender más de esta mirada que me cautivó y encajó totalmente con mi forma de ver el mundo. Tomé diversos cursos en Chile, Argentina y en otros lugares. Me compré los libros de Michael White y seguí mi camino hasta que gracias a una gran amiga mexicana y al Covid-19, en el año 2020 llegué a conocer al Colectivo de Practicas Narrativas. De inmediato me sentí parte de esta comunidad y luego de tomar todos sus cursos y de incluir, por su puesto, una visita a México - uno de mis lugares favoritos para viajar, aprender, conocer y construir amistades- sigo con ellos la Maestría de Terapia Narrativa.

He sido docente de varias universidades aquí en Chile, hice clases por más de 17 años en ese formato. Trabajé por 10 años dentro de tribunales de familia y llevo más de 30 años estudiando y trabajando en el acompañamiento de mujeres que resisten a la violencia dentro de sus relaciones de pareja.

No puedo dejar de mencionar que en estos 30 años de aprendizaje llegué con gusto a los feminismos y a las miradas que acogen el pensamiento crítico, las diversidades y las miradas postcoloniales que ayudaron a seguir complejizando mi mirada del mundo, así como también en mi búsqueda permanente de poder acompañar con dignidad y respeto la vida de las personas que buscan ayuda. Ha sido un camino largo de mirar y mirarme para ir posicionándome cada vez como una practicante y terapeuta narrativa.

Hoy sigo estudiando y trabajando en mi consulta privada y formando una colectiva feminista, nos llamamos Narrativas sin Fronteras.

Como principio, me acuerdo de un tiempo cuando el volumen de los sonidos y la duración de los silencios significaban más que las palabras. Después pasé un par de décadas estudiando la relación entre los ritmos de las plantas, sus propiedades medicinales y los tiempos del cielo y la tierra.

Ha estado involucrada en la práctica narrativa desde los ‘90 y en la enseñanza durante los últimos 10 años. Su práctica terapéutica la ha llevado a trabajar con jóvenes en riesgo social, mujeres y niñas/os que viven con los efectos de la violencia y el abuso y con personas que han vivido trauma, especialmente con refugiadas/os.

Es un terapeuta ocupacional que cree que todos los problemas tienen su origen en sistemas estructurales de opresión y no dentro de las comunidades o los cuerpos y las identidades de las personas. Su trabajo es informado por las Prácticas narrativas, la integración sensorial, prácticas de rendición de cuentas, escritura queer, libros infantiles, la cocina de su mamá y las formas en que vive su comunidad.

Gabriela es antologadora y coautora de Tsunami (Sexto PIso, 2018) y Tsunami 2 (Sexto Piso 2020) autora del libro de relatos La memoria de las cosas (Sexto Piso, DF 2015), del poemario Controlled Decay (Black Goat Press/Akashic Books, NY 2008) y de los libros híbridos ManyFiestas (Gato Negro, 2016) de Leash Seeks Lost Bitch (Song Cave, 2015) y de Taller de Taquimecanografía (Tumbona, 2011).

Trabaja con las Prácticas Narrativas desde el 2002. En 2003 se fue a Australia a estudiar con Michael White. En el 2007, después de que se graduó como psicólogo, regresó a Australia con una beca otorgada por el Dulwich Centre donde continuó sus estudios con Michael White, co-creador de las Prácticas Narrativas.